Nota: En la ediciòn 2010 de cactusinhabitat.org, la poblaciòn de Gymnocalycium de Young, ahora identificada con Gymnocalycium uruguayense, habia sido erròneamente atribuida a Gymnocalycium schroederianum Osten. (Diciembre 2012)
Para determinar qué nombre debe atribuirse a las poblaciones de la especie dominante del género Gymnocalycium Pfeiffer ex Mittler, distribuida en casi todo el territorio de la República de Uruguay y parcialmente en los territorios vecinos (Argentina: Corrientes y Entre Ríos, Brasil: Rio Grande do Sul), resulta útil una breve reseña de la interpretación, en la literatura reciente, de los taxones involucrados. En Anderson (2001, 354, 357, 363) Gymnocalycium hyptiacanthum (Lemaire) Britton & Rose, Gymnocalycium netrelianum (Monville) Britton & Rose y Gymnocalycium uruguayense (Arechavaleta) Britton & Rose, son considerados especies distintas. En Hunt et al. (2006, text: 129, 131, 135, 323) sólo G. uruguayense queda por identificar a las poblaciones en cuestión. Se abandona G. hyptiacanthum para ser una aplicación controvertida, y la neo-tipificación de Kiesling (1999, 2: 444) rechazada como contraria al ICBN Art 57.1. A su vez G. netrelianum se abandona para ser de aplicación incierta. En Cactaceae Systematic Initiatives (2008, 24: 21-25) Cherles y Meregalli llegan a expresar, sobre los taxones en cuestión, una opinión diferente a la de NCL. En resumen, reconocen entre las poblaciones, que ocupan áreas más o menos discretas dentro de la zona de la especie, grados de reconocimiento debidos a la diversidad en los caracteres de las espinas. Se considera correcta la neotipificación de G. hyptiacanthum hecha por Kiesling, y se vuelve a proponer el taxón dividido en tres subespecies: hyptiacanthum, netrelianum y uruguayense. El mismo enfoque es luego aceptado por Charles (2009, 45-51). Presentamos la Key to the subspecies di G. hyptiacanthum (Meregalli) tal como fue publicado en C.S.I. 24: 22. En la página 24, Meregalli nos informa de los cambios y la distribución de las ssp. de G. hyptiacanthum: “The population of G. hyptiacanthumfrom the eastern part of Uruguay are here assigned to ssp. netrelianum. The plants differ from those of the typical subspecies maily for the completely yellow-grey spines, lacking a red base. It is a relatively variable taxon, which in the southern part of its range merges progessively into ssp. hyptiacanthum, whereas towards north it is more similar to ssp. uruguayense. The attribution of the specimens from the central and northen part of the range to this subspecies is questionable: There is in fact a rather continuous clinal change between the plant with the typical traits of ssp. netrelianum and those of the subspecies ssp. uruguayense.” Y más: “At the border with Brasil, near Acegua, a very interesting form was found. It is here referred to ssp. netrelianum, mainly for yellow spines, although there are some differences, namely the sub-campanulate yellow flower. This subspecies intergrades with ssp. hyptiacanthum in the southernmost part of the range, and with ssp. uruguayense in the central-western part of the range...”. Según las palabras del autor sería plausible distinguir taxonómicamente poblaciones que progresivamente se mezclan entre sí, y que en muchas zonas son indistinguibles. Dado que probablemente dos subespecies para existir deberían tener un mínimo de autonomía territorial, pensamos que en un concepto de especies biológicas, entendida como un proceso y no como una unidad estática, compuesta de poblaciones a su vez constituidas de individuos variables y no de tipos, es evidente que las poblaciones que se transforman unas en otras se consideran como pertenecientes a un solo taxón o rama. Es difícil para nosotros pensar que se puedan distinguir las poblaciones dentro de una especie natural, sobre una mayor evidencia de que las espinas en la base son más o menos rojas. En este sentido, la foto que ilustra G. hyptiacanthum ssp. netrelianum (Monville ex Labouret) Meregalli en CSI (2008, 24: 23), taxón que debería ser reconocido por las espinas completamente amarillas, muestra una planta con la base de las espinas rojizas. En cualquier caso, en la era de los análisis moleculares pensamos que ciertas distinciones podrían concernir más al mundo de los coleccionistas que al de la biología. Dejado en claro que estamos hablando de un solo taxón, ¿con qué nombre identificarlo? El derecho de publicación se debería dar a Echinocactus hyptiacantus, descrito en 1839 por Lemaire, de manera incompleta y sin una indicación geográfica precisa. La neotipificación de Kiesling (1999) ha intentado fijar la aplicación del nombre, al menos en la interpretación hecha por algunos coleccionistas y botánicos de América del Sur (Meregalli 2010, 1, 4-5, 11, 17). Pero, además de la interpretación de Kiesling, existe otra de Papsch del 2011, estimada exacta por Charles (2009, 46). Papsch considera el neotipo de Kiesling inválido y sugiere que E. hyptiacanthum sea referible a las especies descritas como Gymnocalycium schroederianum Osten, depositando un nuevo neotipo, y proponiendo G. hyptiacanthum = G. schroederianum. La última interpretación del nombre es de Till & Till & Amerhauser (2010), que a sus vez rechazan la neotipificación de Kiesling, para llevar de nuevo la idea de que G. hyptiacanthum debería ser reportado a las especie ahora conocidas como G. schroederianum. Como en el caso de Gymnocalycium quehlianm (F. Haage ex Quehl) Vaupel ex Hosseus / Gymnocalycium stellatum Spegazzini, pensamos que las diferentes interpretaciones son igualmente plausibles, pero esta y lo que implica, crea confusión. Por lo tanto, de acuerdo con Hunt et al. (2006, texto: 129, 131, 135, 323), se prefiere usar el menos controvertido G. uruguayense para identificar a las poblaciones en cuestión, y creemos los nombres G. hyptiacanthum y G. netrelianumy sus sinónimos homotípicos, de aplicación controvertida. (Traducido de: Anceschi & Magli 2013b, 67-70)